El 9 de marzo Cristian Barrales y Ema Vergara contrajeron nupcias en nuestro establecimiento, materializando una decisión tomada hace algunos meses atrás, previamente a que Cristian se descompensara y tuviera que hospitalizarse. Una ceremonia en la que tuvimos el privilegio de participar como anfitriones, siendo testigos de una bella historia de amor que supo sobreponerse a las dificultades.

Corría noviembre de 2023 cuando Ema y Cristian agendaron una hora en el Registro Civil para casarse el 14 de febrero pasado. No obstante y pese a su voluntad, la pareja debió postergar el enlace para el 8 de marzo. Cristian ya venía desde hace algunos meses con problemas asociados a su diabetes, los que hacia fines de febrero le hicieron ingresar al hospital, donde debió someterse a una intervención quirúrgica.

La fecha del matrimonio se acercaba inexorablemente mientras cursaba su recuperación, que no fue del todo favorable, por lo que debía permanecer hospitalizado y someterse a una nueva operación. Frente al escenario adverso, Cristian y Ema tuvieron que tomar una decisión: suspender o adaptarse y seguir adelante. Contra viento y marea optaron por esto último: solicitaron permiso en el hospital e iniciaron las gestiones. Primero fue el Registro Civil de El Bosque, comuna donde residen, oficina que debió comunicarse con la de San Bernardo para posibilitar la ceremonia. Y aunque solo debió postergarse en un día, este tercer agendamiento vendría a ser el definitivo.

Así, el 9 de marzo y acompañados por familiares a los que se les facilitó el acceso, Ema y Cristian concretaron su aspiración. La ceremonia tuvo lugar a las 18 horas en la Sala de Reuniones de la Dirección, lugar donde oficializaron su matrimonio, con la alegría y emoción de estar cumpliendo un sueño pese a todas las dificultades que debieron enfrentar.

Respecto de la ceremonia, Ema nos señala que “legalizar nuestra unión vino a concretar el sueño de mi hijo fallecido: él quería vernos casados, que formalizáramos la familia que hemos construido en estos años”. Una bella historia de amor iniciada en la adolescencia, cuando se conocieron: “yo tenía 16 años, él fue mi primer amor, mi primer pololo. Nos separamos después de un tiempo, pero la vida nos volvió a juntar 20 años después y desde esa fecha ya han transcurrido 12 años”. En cuanto al hospital, Ema agrega “les agradezco enormemente habernos apoyado en esta decisión”.

Nuestro Apoyo

Pamela Salas, Asistente Social de Pacientes Hospitalizados, fue una de las funcionarias a las que se le solicitó orientación sobre los trámites a realizar para concretar la ceremonia y gestionar el ingreso de familiares. “Durante mi trayectoria de 17 años en el hospital, ya son prácticamente 15 matrimonios en los que he apoyado los trámites que deben cursarse. Junto a las gestiones que alguna vez realicé en Neonatología, los matrimonios son sin duda parte de las actividades más especiales en las que me ha tocado colaborar. Espero sean muy felices”.

Y en el Servicio de Medicina, donde se encontraba Cristian, la funcionaria Karen Zúñiga vivió muy de cerca e in situ el matrimonio: a ella se le solicitó acompañar a Cristian en su bajada al recinto, ayudar en la decoración de la mesa y facilitar una videollamada para que familiares pudieran ser partícipes de la ceremonia. Finalizada esta última también sacó algunas fotografías que les regaló a la pareja y la novia incluso le regaló el ramo que llevaba. “No me había tocado nunca colaborar en algo así. Les deseo mucho éxito y satisfacciones”, nos comparte.

Por nuestra parte y como hospital, nos alegra mucho haber podido brindar las facilidades para materializaran su aspiración de casarse. Reciban entonces un muy afectuoso saludo, nuestros mejores deseos en esta nueva etapa que inician en sus vidas y una completa recuperación para Cristian. Muchas felicidades!!

San Bernardo, 18 de marzo 2024.